>Llevo tres días sin fumar y tres días entrenando con la bici. Me encuentro bastante bien. Tengo un objetivo y esto me tranquiliza. Ya puedo trabajar con un sentido y fin en mente.
Me encuentro bastante bien pero me queda mucho por hacer. He renunciado a una propuesta de formación, difícil para un autónomo! y ya he bloqueado las fechas en las que estaré danzando conmigo mismo encima de la bici. Me encantaría empezar el Camino el domingo 2 de Octubre. Así que convencido digo NO con mayúsculas a ese trabajo de un par de días que me hubieran servido para financiar el viaje.<
Me costó decir NO en un momento en el que el trabajo no abunda y más este año, que económicamente ha sido sensiblemente peor que el anterior.
Estoy muy comprometido con mi objetivo porque está ligado directamente a mi propio desarrollo como persona, como ser humano que desea vivir plenamente, y porque asumo la responsabilidad de vivir mi vida a través de los valores que yo escojo para vivirla. La LIBERTAD, mi libertad ocupa un lugar predominante sobre los demás valores y es el eje sobre el que debe girar mi mundo. Entendido como la autonomía para tomar las decisiones que se alineen con mis propósitos. Este es quizá uno de los aspectos claves de mi relación con Camino y el porqué hace la relación más poderosa. No deja de ser curioso que la libertad es parte de lo que nos une y no la que nos distancia. Acabo de leer algo que tiene mucho que ver con esto, es una frase lapidaria de estas que corren por las redes sociales, y en la que me reconozco y comparto. Dice así: ‘La libertad descansa al otro lado del miedo’
Siento, durante este periodo de preparación, el cosquilleo de la ambición personal de enfocarme hacia una meta muy definida. Para mi tipo de personalidad es como poner un hueso delante de un perro para que te siga. Estoy oliendo el sabor del éxito, el conseguirlo, el poderme decir a mi mismo que cuando quieres algo y vas a por ello, lo consigues. Y por supuesto, el subidón que podré añadir a mi experiencia personal y del que puedo retro-alimentarme cuando lo necesite. Otra fácil forma de nutrir la autoestima.
Durante este periodo de preparación Camino y yo hemos ido y vuelto juntos en bici a Barcelona. Son 45 km en total que han ido muy bien para tomarme el pulso de la forma física en la que me encuentro. A pesar de que no he montado las alforjas y de ser un recorrido totalmente llano, he llegado cansado.
Bueno, siempre que hablo con gente que corre maratones me dicen que antes de la carrera no hacen nunca una maratón entera, así que, sí es una buena referencia, a una semana de irme, pero no es definitiva.
Sé que mi estado mental será crucial para afrontar lo que hoy creo que serán unas 12 etapas. Quiero llegar a mi punto de partida en el mejor estado físico y mental posible. Después avanzar y llegar al final ya dependerá más de mi autogestión física y emocional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario